Las verrugas comunes son la manifestación de la infección por el virus del papiloma humano, siendo las más frecuentes las de las plantas y palmas.
Las verrugas plantares y palmares son muy frecuentes en niños y niñas, en especial si practican natación. Su tratamiento es sencillo y suele ser breve si se realiza adecuadamente. Se debe ser consciente de que el tratamiento mediante la aplicación de líquidos o parches es incómodo y cansado, con lo que se pueden ofrecer alternativas más expeditivas y eficaces. En nuestra experiencia, la mejor respuesta en verrugas poco numerosas se obtiene practicando en consulta una eliminación con crioterapia suave y afeitado (procesos completamente indoloros si se efectúan con pericia) y posterior aplicación de una fórmula magistral que proceda a la eliminación química de las lesiones residuales. Estas terapias son perfectamente toleradas por el paciente y no requieren, la mayoría de ocasiones, un tratamiento muy prolongado.
En casos particularmente rebeldes, o en pacientes que han intentado distintas terapias sin éxito, se practica la inmunoestimulación con la inyección de Candidina. Mediante este proceso se facilita que el paciente produzca inmunidad contra el virus y lo combata de forma natural. En esencia, actuaría en cierto modo como una vacuna.
Referencias bibliográficas
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